Últimos carteles y primeros traslados

En los últimos días, se han sucedido las últimas presentaciones de carteles, dejando paso a la verdadera antesala de la Semana Santa: los traslados de los sagrados titulares desde sus iglesias a sus respectivas casas de hermandad.

El pasado viernes, acudí a la presentación del cartel de salida procesional del Prendimiento, que tuvo lugar en el salón de actos de la casa hermandad del Rocío. Empezó mal la cosa, porque el acto se retrasó media hora, aunque después vino lo peor: tanto en la proyección de un documental sobre los 50 años de la primera salida de la Virgen del Gran Perdón como en el pregón, los asistentes se dedicaron a charlar entre ellos como si estuvieran en su casa, algunos, incluso, hablando por teléfono (el que estaba justo a mi derecha, por poner uno de los muchos ejemplos). En varios momentos, pasó por mi cabeza la posibilidad de abandonar la sala, pero pensé: "Por culpa de algunas personas que pasan de escuchar al pregonero mientras cotorrean o son partícipes de una conferencia telefónica no voy a dejar de ver un bonito documental (donde, por cierto, salgo yo fugazmente) o de disfrutar de un emotivo pregón." Y, como no, al final del acto, todo el mundo quería llevarse un inmerecido cartel de recuerdo; además, yo sólo pude llevarme uno, a pesar de pedirle al que los repartía un par de ellos más para amigos que también me consiguen a mí los de otras cofradías, el cual me argumentó que sólo uno por persona, que si no no habría para todos. Qué sorpresa la mía cuando, en el mismo salón de actos, me crucé con otros asistentes que llevaban, por lo menos, ocho o diez carteles. ¿Alguien me lo explica? En fin, esta situación me recuerda mucho a la que viví hace un año en otra presentación de cartel, aunque, esta vez, no hubo partido del Real Madrid que escuchar.
Por su parte, la Archicofradía de la Expiración presentó este martes el cartel del traslado del Viernes de Dolores. El salón de actos de la casa hermandad estaba hasta los topes, más incluso que en la presentación del cartel del Miércoles Santo; yo, que llegué con quince minutos de margen, me tuve que sentar en la última fila. El encargado de dar el pregón fue un antiguo hermano mayor del Cautivo, que recordó viejas anécdotas de su infancia con la cofradía perchelera. Al igual que en el acto del Prendimiento, hubo varias personas que aprovecharon para llamar a un amigo o hablar con su acompañante, sobre todo los que se agolpaban a la entrada del salón, a apenas cinco metros de mí. Al menos, algunos asistentes mandaron callar a dichos individuos varias veces, aunque de todos es sabido que, al final, siempre hay alguien que hace caso omiso. Cuando se descubrió el cartel, todo el público asistente se puso en pie para aplaudir el gran trabajo de la pintora Conchi Quesada, que plasmó en una gran pintura a la Virgen de los Dolores Coronada. La artista se acercó posteriormente al atril para explicar lo que había experimentado al pintar el cuadro; fueron tan emotivas sus palabras que ella misma rompió a llorar.
En cuanto a los traslados, ayer dieron el pistoletazo de salida las cofradías del Monte Calvario, Rescate y Estudiantes. La primera de ellas sólo procesionó a Nuestra Señora de Fe y Consuelo, que partió desde la ermita del Monte Calvario hasta su casa hermandad de la calle Fernando el Católico, a donde ya había llegado cuando me acerqué para hacer unas fotos. A continuación, a las nueve de la noche, tuvo lugar el corto traslado de los titulares del Rescate, ya que la capilla donde se les rinde culto está a pocos metros de la casa hermandad. Por último, Estudiantes volvió a congregar a miles de personas, lo que da muestras de que es una de las cofradías más queridas y seguidas de Málaga. Fueron varias las saetas que se cantaron a los titulares en varios puntos del recorrido, y también varias veces se pudo escuchar el 'Gaudeamus Igitur', himno estudiantil y signo de identidad de la cofradía, pero el mejor momento, para mi gusto, fue en calle San Agustín, cuando, a la altura del Museo Picasso, la Banda de Música de Las Flores interpretó 'La Madrugá', una de las mejores marchas procesionales en un marco incomparable, y es que no me canso de decir que esta calle es la mejor de toda Málaga en Semana Santa y por donde deberían pasar todas las cofradías que pudieran. El encierro pude disfrutarlo dentro de la casa hermandad, ya que un amigo de mi padre que es hermano de la cofradía nos invitó a pasar; además, tuve la oportunidad de disfrutar de una gran vista de la Alcazaba desde la terraza del edificio (aproveché para tomar algunas fotos) y de ver la complicada maniobra de entronización del Cristo Coronado de Espinas.
Dentro de unos minutos, en el Teatro Cervantes, tendrá lugar el Pregón de la Semana Santa de Málaga, que será pronunciado, tras un breve concierto de la Banda de Música de la Expiración, por Ana María Flores Guerrero, hermana de las cofradías de las Penas, Paloma y Monte Calvario. Con respecto a los traslados, mañana es el día grande, ya que hasta nueve discurrirán por las calles de Málaga. Si el tiempo lo permite (las previsiones anuncian lluvia a lo largo del día), mañana domingo podremos disfrutar de los siguientes traslados (entre paréntesis, las horas previstas de salida): Sangre (12:00), Gitanos (17:30), Prendimiento (18:15), Pollinica (18:30), Huerto (18:45), Rocío (18:45), Piedad (21:00) y Viñeros (21:00). Además, a las 12:00 se entronizará el Cristo de la Agonía en el Oratorio de Pozos Dulces, y la Esperanza realizará el traslado claustral de sus imágenes a las 21:00.
Hoy os traigo un nuevo vídeo con el que poder deleitar nuestros oídos al tiempo que contemplamos a los titulares de la Semana Santa de Málaga. El momento que podéis ver en el vídeo se corresponde con el encierro de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto en la procesión extraordinaria que tuvo lugar el 1 de noviembre de 2007. En él, la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora de la Victoria de Sevilla 'Las Cigarreras' interpretó magistralmente la marcha 'Costalero del Soberano'; aquellos intensos minutos no se me olvidarán nunca, ya que fueron, sin duda alguna, de los mejores que he vivido en relación con la Semana Santa. La suave mecida del trono y la bellísima marcha con la que nos deleitó Cigarreras, la mejor banda de cornetas y tambores que he escuchado en directo, hacen que se me pongan los vellos de punta. Para mi recuerdo quedará que yo estuve allí, que yo lo viví, que yo lo sentí y que yo me emocioné.