Como supongo que habréis visto en las noticias, en la pasada madrugada del jueves hubo eclipse de Luna. Esta era una ocasión única para ver esta maravilla astronómica, por lo que me fui a casa de Javi para poder verlo con el telescopio de éste.
Como el oscurecimiento empezaba cerca de las 3 de la madrugada, nos acostamos prontito, a las 11 para ser exactos, para no estar tan cansados. A las 2:30h nos levantamos y subimos a la azotea bien abrigados para no coger un resfriado como el que yo llevaba encima desde hace unos días, y del que sigo afectado. Como era de esperar, las previsiones se cumplieron y el cielo se presentó nublado para tal acontecimiento; además, hacía bastante viento. De vez en cuando, cuando las nubes nos lo permitían, podíamos ver cómo la silueta de la Luna iba desapareciendo. A veces, nos tirábamos diez minutos sin poder ver nada, y cuando el satélite se asomaba en un claro, apenas daba tiempo a verlo por el telescopio, porque primero había que localizarlo con éste. Por suerte, yo me llevé mi cámara digital para poder inmortalizar este evento, aunque sólo pudimos sacar cinco o seis fotos en las que se viera algo. También tuvimos la ocasión de ver el eclipse con unos prismáticos que me llevé, un método algo más rápido y sencillo de usar que el telescopio de Javi, aunque hay que reconocer que con el telescopio se veía mejor, lógicamente. El punto de máxima oscuridad, en el que la Luna presentaba un color rojizo, tuvo lugar a las 4:26h, justamente cuando más nubes había en el cielo, por lo que verlo a través del telescopio fue casi un milagro, dadas las circunstancias, y tampoco pudimos tomar fotos, ya que, al emitir tan poca luz en esos instantes, la cámara sólo 'veía' oscuridad. Otra cosa que también teníamos prevista era, aprovechando que la Luna se hallaba totalmente oculta, ver con el telescopio el planeta Saturno, que se encontraba cerca del satélite terrestre, pero, como podéis suponer, las nubes lo impidieron. A las 5, recogimos los bártulos y volvimos a casa de Javi para dormir un ratito, ya que a las 7 teníamos que estar de nuevo en pie para ir a la facultad.
En resumen, que la experiencia, a pesar de las inclemencias meteorológicas, estuvo bastante bien, y el eclipse, precioso. Y ya habrá que esperar hasta el 2010 para poder contemplar el próximo eclipse lunar total, aunque el 16 de agosto de este año tenemos uno parcial, es decir, que podremos ver cómo se oscurece la Luna, pero no del todo; además, empezará a una hora mucho más llevadera, a las 9 de la noche, lo que, unido al buen tiempo que solemos tener en verano, seguramente permitirá un mejor visionado tanto del eclipse como de otros aspectos astronómicos, como planetas, constelaciones, nebulosas, etc.
En resumen, que la experiencia, a pesar de las inclemencias meteorológicas, estuvo bastante bien, y el eclipse, precioso. Y ya habrá que esperar hasta el 2010 para poder contemplar el próximo eclipse lunar total, aunque el 16 de agosto de este año tenemos uno parcial, es decir, que podremos ver cómo se oscurece la Luna, pero no del todo; además, empezará a una hora mucho más llevadera, a las 9 de la noche, lo que, unido al buen tiempo que solemos tener en verano, seguramente permitirá un mejor visionado tanto del eclipse como de otros aspectos astronómicos, como planetas, constelaciones, nebulosas, etc.
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