Brillante colofón a un año jubilar mariano que se clausuró con la procesión de ayer.
Las puertas de la Iglesia de los Mártires se abrieron a la hora prevista (20:45h). La Banda de CC. y TT. de la Esperanza encabezó el cortejo procesional tras la cruz guía de la Archicofradía de la Pasión y, tras ellos, numerosos hermanos y fieles portando cirios, además de representantes de varias cofradías y cargos políticos y religiosos. A las 21:10h, tras las maniobras necesarias para que el trono pudiera pasar por las puertas del templo, María Santísima del Amor Doloroso salió a la calle a los sones de 'La Estrella Sublime'. La procesión, que recorrió el itinerario previsto, se encontró con algunas dificultades en algunos puntos (calle Strachan, Nueva...), debido a la presencia de andamios; los hombres de trono se tuvieron que esforzar ante tales contratiempos, que, una vez resueltos portando el trono con sumo cuidado, hicieron que el público allí presente atronara con sus aplausos.
A las 0:45h, el trono llegó a una Plaza de los Mártires abarrotada y, tras diez minutos de maniobras, volvió a su templo al tiempo que la Banda de Música de la Expiración, perfecta durante toda la noche, interpretaba el 'Himno Nacional'.
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