Importante victoria del Málaga, que venció por 3-0 a un Sevilla Atlético aguerrido, pero con falta de pegada. Todo se decidió en el último cuarto de hora, en el que se marcaron los tres goles de la tarde.
La primera parte fue entretenida. A los dos minutos, una internada de Calleja a punto estuvo de inaugurar el marcador, pero Salva llegó tarde al centro de su compañero. A partir de ahí, el filial sevillista cogió las riendas del partido, llegando en varias ocasiones al área malacitana; muestra de ello fueron los remates de Armenteros, que botó una falta lateral envenenada que obligó a Goitia a emplearse a fondo con un despeje apurado, y de Lolo, que enganchó un potente disparo desde larga distancia. Llegado el ecuador de la primera mitad, el Málaga reaccionó y dejó de ceder terreno al rival. Hélder Rosário, emulando al mejor Messi, cogió el balón en el centro del campo y, tras regatear a varios defensas, chutó desde la frontal del área, pero su disparo centrado y flojo fue detenido por el portero hispalense. Las dos últimas ocasiones estuvieron protagonizadas por Baha: en la primera, su remate se marchó por poco y dio en el lateral de la red; en la segunda, enganchó un buen cabezazo desde la frontal que detuvo sin problemas Javi Varas. Con respecto al árbitro, su actuación fue deficiente, sobre todo al no amonestar a uno de los defensas sevillistas, y ni siquiera pitar falta, en una entrada peligrosa sobre Paulo Jorge; es probable que el zaguero no tocara al centrocampista portugués, pero la peligrosidad de la falta fue claramente merecedora de ser castigada con tarjeta amarilla.
La segunda mitad volvió a ser, como demuestran las últimas semanas, decisiva. Poco se pudo destacar en los primeros minutos del segundo período, en el que el entrenador del Málaga realizó dos cambios con marcado carácter ofensivo: Eliseu y Apoño relevaron en el campo a Rossato y Carpintero, respectivamente. A los veinte minutos de reanudarse el encuentro, Goitia resolvió con acierto un mano a mano con Salva Sevilla; acto seguido, Eliseu centró desde la banda izquierda y Salva, prácticamente solo, remató con la derecha, su pierna mala, un balón que se fue rozando el poste. Acto seguido, el Sevilla Atlético tuvo su mejor ocasión: Pablo Sánchez chutó a escasos metros de la portería local y Goitia, en una gran demostración de reflejos, repelió el balón con la punta de los dedos. Y llegó el minuto clave. A un cuarto de hora para el final, Calleja centró al segundo palo, donde Baha cedió de cabeza a un Antonio Hidalgo que, tras controlar con el pecho, empaló al fondo de las mallas (1-0). Aún se estaba celebrando el primer gol cuando Baha dio un gran pase en profundidad a Eliseu que sólo tuvo que ceder el balón a Salva Ballesta para que rematara a puerta vacía (2-0). En un minuto, el partido quedó decidido, lo que noqueó al filial sevillista, que al inicio del descuento vio cómo Salva Ballesta conseguía un doblete tras un nuevo centro de Eliseu desde la izquierda (3-0). Al igual que en la primera mitad, el árbitro volvió a equivocarse varias veces; a mencionar, un posible penalty sobre el sevillista Alfaro y una falta sobre Eliseu, que fue agarrado y empujado durante unos veinte o treinta metros, que incomprensiblemente no pitó, amén de otras decisiones que enervaron al poco público asistente, debido principalmente a la lluvia.
Con esta victoria, el conjunto blanquiazul se mantiene en la segunda posición de la tabla clasificatoria, tras un Numancia que sigue líder tras vencer esta tarde; la ventaja sobre el cuarto clasificado, el Elche, sigue siendo de siete puntos. En la próxima jornada, que será el año que viene, el Málaga rendirá visita al Cádiz, en un nuevo derbi andaluz.
La primera parte fue entretenida. A los dos minutos, una internada de Calleja a punto estuvo de inaugurar el marcador, pero Salva llegó tarde al centro de su compañero. A partir de ahí, el filial sevillista cogió las riendas del partido, llegando en varias ocasiones al área malacitana; muestra de ello fueron los remates de Armenteros, que botó una falta lateral envenenada que obligó a Goitia a emplearse a fondo con un despeje apurado, y de Lolo, que enganchó un potente disparo desde larga distancia. Llegado el ecuador de la primera mitad, el Málaga reaccionó y dejó de ceder terreno al rival. Hélder Rosário, emulando al mejor Messi, cogió el balón en el centro del campo y, tras regatear a varios defensas, chutó desde la frontal del área, pero su disparo centrado y flojo fue detenido por el portero hispalense. Las dos últimas ocasiones estuvieron protagonizadas por Baha: en la primera, su remate se marchó por poco y dio en el lateral de la red; en la segunda, enganchó un buen cabezazo desde la frontal que detuvo sin problemas Javi Varas. Con respecto al árbitro, su actuación fue deficiente, sobre todo al no amonestar a uno de los defensas sevillistas, y ni siquiera pitar falta, en una entrada peligrosa sobre Paulo Jorge; es probable que el zaguero no tocara al centrocampista portugués, pero la peligrosidad de la falta fue claramente merecedora de ser castigada con tarjeta amarilla.
La segunda mitad volvió a ser, como demuestran las últimas semanas, decisiva. Poco se pudo destacar en los primeros minutos del segundo período, en el que el entrenador del Málaga realizó dos cambios con marcado carácter ofensivo: Eliseu y Apoño relevaron en el campo a Rossato y Carpintero, respectivamente. A los veinte minutos de reanudarse el encuentro, Goitia resolvió con acierto un mano a mano con Salva Sevilla; acto seguido, Eliseu centró desde la banda izquierda y Salva, prácticamente solo, remató con la derecha, su pierna mala, un balón que se fue rozando el poste. Acto seguido, el Sevilla Atlético tuvo su mejor ocasión: Pablo Sánchez chutó a escasos metros de la portería local y Goitia, en una gran demostración de reflejos, repelió el balón con la punta de los dedos. Y llegó el minuto clave. A un cuarto de hora para el final, Calleja centró al segundo palo, donde Baha cedió de cabeza a un Antonio Hidalgo que, tras controlar con el pecho, empaló al fondo de las mallas (1-0). Aún se estaba celebrando el primer gol cuando Baha dio un gran pase en profundidad a Eliseu que sólo tuvo que ceder el balón a Salva Ballesta para que rematara a puerta vacía (2-0). En un minuto, el partido quedó decidido, lo que noqueó al filial sevillista, que al inicio del descuento vio cómo Salva Ballesta conseguía un doblete tras un nuevo centro de Eliseu desde la izquierda (3-0). Al igual que en la primera mitad, el árbitro volvió a equivocarse varias veces; a mencionar, un posible penalty sobre el sevillista Alfaro y una falta sobre Eliseu, que fue agarrado y empujado durante unos veinte o treinta metros, que incomprensiblemente no pitó, amén de otras decisiones que enervaron al poco público asistente, debido principalmente a la lluvia.
Con esta victoria, el conjunto blanquiazul se mantiene en la segunda posición de la tabla clasificatoria, tras un Numancia que sigue líder tras vencer esta tarde; la ventaja sobre el cuarto clasificado, el Elche, sigue siendo de siete puntos. En la próxima jornada, que será el año que viene, el Málaga rendirá visita al Cádiz, en un nuevo derbi andaluz.
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