Se hace el silencio. Las voces se apagan. El silbido de las cornetas es música que invade la Plaza de los Mártires. Nada más. Se unen los tambores. Sonido celestial. El trono del Cristo avanza a paso lento, mecido suavemente, abriéndose camino en la multitud, directo a su templo. Las cornetas se hablan entre ellas, llorando, rozando el aire. Al 'Costalero del Soberano' no le pesa el trono, se mueve solo. Se acaba la música... y empieza otra, la de los aplausos. Atronador.
A las 18:05h se abrieron las puertas de la Iglesia de los Mártires. Tras una hilera de hermanos de la Archicofradía, portando cirios, bastones de mando y demás enseres, aparece Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto en un trono cedido por la Archicofradía hermana de la Pasión. Detrás, la Banda de CC. y TT. de Nuestra Señora de la Victoria de Sevilla 'Las Cigarreras' toca la 'Marcha Real' al tiempo que el Cristo cruza las puertas del templo.
Se siguió el itinerario previsto, con sendas estaciones en la Capilla de la Paloma (18:55h) y en la Iglesia de San Agustín (20:50h); en esta última, un coro cantó al titular del Huerto. Además, en calle San Agustín y en la Plaza de los Mártires se pudieron escuchar dos saetas dedicadas a Nuestro Señor. La procesión extraordinaria terminó a las 22:30h, una hora más tarde de lo previsto.
La afluencia de gente fue como la de un día de Semana Santa. La gente acudió en masa a una cita marcada en rojo en el calendario por dos razones: la primera, ver a Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto en procesión extraordinaria; la segunda, escuchar las marchas de 'Las Cigarreras'. La ocasión lo merecía, y los sevillanos no fallaron, es más, brillaron. Es un lujo que esta banda haya venido a Málaga siete años después, porque la forma en que ellos tocan es simplemente perfecta. Yo nunca he escuchado en directo nada igual. Interpretaron marchas tan conocidas como 'Amor de Madre', 'Cristo de la Buena Muerte', 'La Expiración', 'Macarena', 'Cristo del Amor', 'Soledad de San Pablo' y otras muchas que encandilaron a un público que supo agradecer con aplausos el buen hacer de esta banda. Pero la mejor marcha que tocaron ayer, al menos en mi opinión y creo que también es la de la mayoría que estuvo allí, fue 'Costalero del Soberano' al entrar en la Plaza de los Mártires poco antes de que se recogiera el trono. A mí se me pusieron los vellos de punta, y no exagero en absoluto; no se puede expresar con palabras lo que viví en aquel momento. Las primeras líneas de este texto es lo más parecido a lo que sentí allí. Ojalá esto se repita pronto, porque uno no se cansa nunca de escuchar marchas procesionales como Dios manda.
A las 18:05h se abrieron las puertas de la Iglesia de los Mártires. Tras una hilera de hermanos de la Archicofradía, portando cirios, bastones de mando y demás enseres, aparece Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto en un trono cedido por la Archicofradía hermana de la Pasión. Detrás, la Banda de CC. y TT. de Nuestra Señora de la Victoria de Sevilla 'Las Cigarreras' toca la 'Marcha Real' al tiempo que el Cristo cruza las puertas del templo.
Se siguió el itinerario previsto, con sendas estaciones en la Capilla de la Paloma (18:55h) y en la Iglesia de San Agustín (20:50h); en esta última, un coro cantó al titular del Huerto. Además, en calle San Agustín y en la Plaza de los Mártires se pudieron escuchar dos saetas dedicadas a Nuestro Señor. La procesión extraordinaria terminó a las 22:30h, una hora más tarde de lo previsto.
La afluencia de gente fue como la de un día de Semana Santa. La gente acudió en masa a una cita marcada en rojo en el calendario por dos razones: la primera, ver a Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto en procesión extraordinaria; la segunda, escuchar las marchas de 'Las Cigarreras'. La ocasión lo merecía, y los sevillanos no fallaron, es más, brillaron. Es un lujo que esta banda haya venido a Málaga siete años después, porque la forma en que ellos tocan es simplemente perfecta. Yo nunca he escuchado en directo nada igual. Interpretaron marchas tan conocidas como 'Amor de Madre', 'Cristo de la Buena Muerte', 'La Expiración', 'Macarena', 'Cristo del Amor', 'Soledad de San Pablo' y otras muchas que encandilaron a un público que supo agradecer con aplausos el buen hacer de esta banda. Pero la mejor marcha que tocaron ayer, al menos en mi opinión y creo que también es la de la mayoría que estuvo allí, fue 'Costalero del Soberano' al entrar en la Plaza de los Mártires poco antes de que se recogiera el trono. A mí se me pusieron los vellos de punta, y no exagero en absoluto; no se puede expresar con palabras lo que viví en aquel momento. Las primeras líneas de este texto es lo más parecido a lo que sentí allí. Ojalá esto se repita pronto, porque uno no se cansa nunca de escuchar marchas procesionales como Dios manda.
5 comentarios:
Cigarreras ayer me enamoro, y la he escuchado en muchisimas ocasiones. Pero ayer me demostraron que son los mejores. Chapo para cigarreras...Chapo para Costalero del Soberano, Refugiame, Sobre los Pies te lleva Sevilla, Reinas del Baratillo, Soberano en Getsemaní...me dejaron sin palabras. El 21 de Noviembre tendre el placer de escucharlos de nuevo en Sevilla. Ya te contare que tal fue Rafa.
Como se nota que llevas la procesión en el alma. ^^
Ese primer párrafo me ha encantado...
Ojalá todos tuviéramos una pasión que nos hiciera escribir cosas así.
Increíble entrada, fantástica, no hay palabras rafalillo
Publicar un comentario